A Dios:
Nada podía conmigo.
Han vuelto a mí los instintos más primitivos.
Caigo, lloro, odio; siento.
Sobrevivo.
Tengo miedo pero ahora lo puedo afirmar;
Nada no podrá ya conmigo.
Nada se ha convertido en Vencido.
Muchas gracias, es usted bienquerido.
Hasta pronto y saludos cordiales de una del rebaño;
la empecinada, la esquilada, la perdida.
La que con las piedras del camino ha marcado un recorrido y se ha encontrado.
1 comentario:
mola o teu blog.actualizas mais ca min jaja
a ver se colgo mais fotos.
ninguen comenta nada é desesperante, da a sensación de que non entra ninguen, o único que cambia é o contador de visitas.
bicos
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